El evento se celebra frente al
puerto de Valencia, y a parte de la bebida, se podrá disfrutar de horas de
música y de la tradicional paella
Día
03/05/2012 - 19.23h
Una macrofiesta privada dirigida principalmente al
mundo universitario espera reunir hoy jueves a unos
10.000 jóvenes en un solar frente a los tinglados del puerto de Valencia,
donde podrán beber alcohol, comer paella y escuchar música de baile durante
diez horas.
A la bautizada como «Live Spring» (fiesta de la
primavera) han comenzado a llegar pasado el mediodía estudiantes, la mayor
parte universitarios y todos mayores de edad, cargados con cubos llenos de
bebida en envases de plástico, de acuerdo con las exigencias de los
organizadores.
Al interior del recinto solo se
podía acceder con botellas de plástico
La
iniciativa, heredera de los «macrobotellones» organizados hace un par de
años desde el ámbito universitario, ha sido puesta en marcha esta vez con un
propósito «festivo» por la empresa Babalú Group, que espera reunir a 10.000
jóvenes, según han informado a EFE fuentes de la organización.
El concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de
Valencia, Miquel Domínguez, se ha acercado al recinto para
conocer el desarrollo de la fiesta, donde ha aclarado que ésta ha sido
autorizada por la Conselleria de Gobernación sobre unos terrenos propiedad de
Adif.
Por ello, la actuación del consistorio se limitará a
garantizar que no se beba alcohol en la vía pública, que no se ensucie y
que no se generen molestias acústicas, en cuyo caso el Ayuntamiento «podría
sancionar a los responsables», ha dicho Domínguez.
El edil ha hecho un llamamiento a los jóvenes a que
«no generen molestias fuera del recinto», y ha asegurado que la Policía Local
ha puesto suficientes medios» para evitar que se produzcan incidentes en los
alrededores.
El recinto, situado junto al circuito urbano de
Fórmula Uno, cuenta con tres escenarios donde sonará tanto pop-rock
comercial como música techno y podrá cantarse en modalidad «karaoke», además de
albergar representaciones teatrales y espectáculos musicales hasta las
22.00 horas, cuando terminará la fiesta.
En su interior se ha instalado un hospital de campaña,
hay tres ambulancias y un equipo de seguridad integrado por 30 personas, y se
cuenta con patrullas de limpieza para evitar que se degraden las inmediaciones.
Vecinos de la finca cuya fachada recae en el solar del
Grao, y desde donde puede escucharse la música con total nitidez, han colgado
un cartel donde se puede leer «Fuera macrobotellón» y han expresado las
críticas por una fiesta que ya se organizó en el mismo recinto hace dos años, causando
grandes molestias a los vecinos.
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urante las
épocas pasadas, las personas vivían para
trabajar, tal era la magnitud de esta creencia, que el ocio era considerado
“fuente de
per-versiones y pecados”. Las religiones
y las instituciones, en especial la
iglesia, se esforzaron para mantener este pensamiento y consideran el ocio como
algo pecaminoso.
Pero con el avance de las tecnologías se produce un
cambio. Con la Sociedad Industrial, se incentiva el descanso
semanal, para que los trabajadores estén más descansados y vuelvan al trabajo
con más ganas, y así trabajen mejor y estén más contentos.
La sociedad de
hoy, “persigue
el ocio improductivo, aquel no basado en el consumo”. Esto es lo que podemos
ver en la noticia, una juventud basada en el ocio, dispuestos a consumir,
siendo el alcohol la principal fuente.
Debido a las reducidas alternativas que hay de
ocio para los jóvenes, estos, prefieren hacer macrobotellones, ya que es una
buena alternativa para integrarte socialmente y es una actividad barata.
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